Reflexión sobre Heraldos de Babel

Nuestro club de lectura Heraldos de Babel, a través de la aventura que representa el mundo de Orbe, a través de sus historias y sus personajes, pretende inculcar una serie de valores fundamentales que nuestra sociedad actual ha perdido o está perdiendo. Orbe es un lugar terriblemente cruel, marcado por la violencia, el miedo y el odio, y, aun así, ni siquiera alcanza a atisbar todos los males que asolan nuestra realidad diaria y a los que nuestros alumnos deben enfrentarse continuamente. Orbe trata de constituirse como un reflejo de nuestro mundo tratado en clave de fantasía y ciencia ficción con el evidente objetivo de hacerlo más ameno a nuestros jóvenes estudiantes. Pero a través de Orbe formaremos al alumnado en una cultura de paz y no violencia, una cultura de fe y espiritualidad, de amor y de respeto, de compañerismo y solidaridad. Esos personajes o personas que habitan Orbe, que sufren y sobreviven a duras penas en este mundo de hostilidades somos nosotros, todos y cada uno de nosotros. Afortunadamente, las herramientas para afrontar el mundo de allá fuera son solo nuestras, de cada uno, y reposan dentro de nosotros esperando ser encontradas. Sin embargo, esta tarea a veces se torna realmente complicada y solo con la ayuda del otro llegamos a ser capaces de alcanzarlas. Esto es el club de lectura, esto es Orbe, esto es heraldos de Babel, un camino dialógico-narrativo donde el aprendizaje cooperativo y participativo toma forma y se constituye en el pilar que lo sustenta todo.